El Blog del Air Hockey

25.10.06

Diamond Drift, campeones de la AHC TriCup

Los Diamond Drift han ganado su primera AHC TriCup tras ganar su ultimo partido frente a We'll never Walk Alone (10-5) y ver como el resto de resultados de la jornada les eran favorables, ya que Los Magos de la Mesa perdieron contra Veteranos '97 (12-3) y Wizards solo pudieron derrotar a JCV por 9-6.

El combinado de Mauro Sturlese, Javi Navarro, Jordi Cadelo, Rafa Ochoa y Oriol Garcia-Alzorriz acaba la temporada invicto, primero y con dos puntos de ventaja sobre el segundo clasificado, Veteranos '97.

8.10.06

Habemus mesas!

Oh, por fin ya las tenemos en nuestro poder! AHC ya posee sus propias mesas de air hockey gracias a un chollete que nos ha ofrecido el mítico Félix Soler de Abrera.

Bien, después de una historia culebronesca, finalmente llegó el día D, 7 de octubre de 2006. Nos juntamos Jordi Giménez, Javi Navarro, Marc García, Sergio López, Benito López (padre de Sergio) y myself y nos fuimos a Mataró a recoger las famosas 3 mesas, a las 8 de la madrugada del sábado. Llegamos ahí a Mataró y Félix nos abrió el local donde estaban las mesas. La imagen del local era bastante dantesca y nadie de nosotros hubiera puesto la mano en el fuego por que funcionaran correctamente. Pero en un acto de fe pagamos los 600€ (200€ cadascuna) que Félix fijó como precio y las montamos en el camión del padre de Sergio. Qué camión! Parecía diseñado expresamente para el transporte de mesas de air hockey :-)
Ya con las mesas cargadas cogimos y nos dirigimos a la que será su primera ubicación provisional para probarlas, pero antes hicimos un alto en el camino en Bellvitge, donde nos pegamos un almuerzo de aúpa, de esos bien generosos en colesterol. Esta parada también fue providencial, ya que detectamos que algunos de los tornillos que sujetan las patas al resto de la mesa se habían desprendido, cosa que pudimos solucionar sin más problema.

Tras el almuerzo nos fuimos hacia el Alt Camp, a la torre de mi familia en El Pla de Santa Maria, en cuyo garaje las íbamos a colocar provisionalmente. Tuvimos un par de sustos cuando primero el motor generador de electricidad hizo un poco el tonto para arrancar y luego la primera mesa que probamos hizo lo propio con su mecanismo de arranque. Pero una vez logramos hacerlos funcionar, todo fue muy bien. Qué digo bien... perfectamente! Tras pasarles un poco de limpiacristales por la superficie (llevaban varios meses expuestas al polvo del lúgubre garaje mataroní) el disco se deslizaba por las 3 mesas con una rapidez y una suavidad mucho mejor que las que ofrecen las de los distintos centros recreativos que hasta ahora hemos conocido.
En definitiva, un negocio redondo. A partir de ahora, estas mesas pasarán de ser una excelente inversión a el escenario donde se dirimirán los enfrentamientos airhockeros del futuro.